En la sede de "La mejor práctica", en Viena, recientemente fue destacado el proyecto del CIDEM "De basura a viviendas", en el boletín en línea Best Practice Newsletter No.18, el cual estuvo enfocado hacia la construcción ecológica. EL CIDEM, un instituto de desarrollo de la Universidad Central de Las Villas, en Cuba, es socio mayor de la Red EcoSur y anfitrión de la III Conferencia de EcoMateriales, a efectuarse en Santa Clara, en noviembre de 2005. Lo que sigue es un extracto de este artículo.
(Traducido de Best Practice Newsletter No.18)
Reciclaje de basura para la construcción de viviendas
El CIDEM, un instituto de desarrollo de la Universidad Central de Las Villas, en Cuba, es socio mayor de la Red EcoSur y anfitrión de la III Conferencia de EcoMateriales, a efectuarse en Santa Clara, en noviembre de 2005.
Idea principal
Este ejemplo de "Mejor práctica" trata sobre una tecnología constructiva local. Para poder independizarse de importaciones, Cuba tenía que encontrar una alternativa al cemento tradicional. Los desechos de la caña de azúcar se emplean para la producción de materiales, un método que también incorpora el procesamiento de escombros de la construcción. Esta novedosa tecnología ha impulsado un proceso de reconstrucción con la participación de la población.
Punto de partida
El clima caribeño provoca muchos daños a las edificaciones en los pueblos cubanos. También los huracanes que frecuentemente pasan por Cuba han causado mucha destrucción. La forma más rápida y económica para darles un techo a los perjudicados es renovarles la casa destruida.
Los materiales de construcción en general, especialmente el cemento Pórtland, resultan demasiado caros y complicados de usar. Varias veces el país se ha visto ante un "cuello de botella" ante el incremento de los precios. Durante el período especial, en los noventa, el CIDEM buscó alternativas y concibió un método para crear sustitutos a partir de materiales viejos y los desechos de la producción azucarera. El cemento hecho con la ceniza producida en la quema de los residuos de caña, tradicionalmente se emplea en la producción de ladrillos.
Experiencias
En talleres organizados por todo el país se ha divulgado esta tecnología desarrollada en la Universidad de Las Villas.
Con suficientes materiales de construcción y precios razonables se ha iniciado un proceso de reconstrucción. El Instituto Nacional de la Vivienda, autoridades locales y los bancos han podido negociar un sistema de créditos atractivo, para apoyar a los ciudadanos en la reconstrucción de sus hogares. La mayoría de los cubanos son dueños de su vivienda, pero por problemas de abastecimiento se ven inactivos. Con la posibilidad de obtener materiales locales y apoyo financiero, ahora se organizan en grupos de auto ayuda.
De las 350 familias que han decidido usar este nuevo material de construcción para renovar sus casas, 80 han aprovechado los créditos. Se han generado 50 puestos de trabajo, muchos de ellos ocupados por mujeres. Hasta marzo de 2004, se habían construido 1 200 viviendas de forma que resistan los huracanes.