ed_21_bambu_002

Del 17 al 19 de Mayo, el CIDEM organizó una conferencia regional de Bambú en Santa Clara, Cuba. Más de 80 participantes de 8 países tuvieron debates muy interesantes durante tres días, concentrándose en asuntos técnicos en el primer día, el aspecto económico en el segundo día y los aspectos sociales en el último día.

Galería fotográfica

El primer día fue principalmente para los investigadores colombianos y cubanos que discutireron las diferentes técnicas de propagación y cultivo del bambú, pero también el impacto en el cambio climático y las diferentes posibilidades del uso de las plantaciones de bambú para mitigar el daño ecológico que nuestra sociedad está causando a la tierra. Los aspectos de la planificación en general para asegurar las fuentes existentes de agua en Cuba fueron presentados, así como los datos científicos de la cantidad de CO2 que es absorbida por el bambú. Desafortunadamente las reglas para acceder al mercado internacional del carbono son difíciles de cumplir e inclusive grandes compañías con miles de hectáreas de bambú no pueden obtener una ganancia de esto.

La mayoría de las presentaciones acerca de las posibilidades económicas del bambú se centraron en la producción de diferentes tipos de madera prensada. Mientras un proyecto en Ecuador se concentra en producir diferentes tableros con un mínimo de energía, un empresario mexicano presentó su industria de alta tecnología que produce tableros de altísima calidad. Otros pequeños proyectos en Colombia y Cuba también experimentan con diferentes acercamientos, concentrándose principalmente en los aspectos de bajo costo y evitando los aglomerantes tóxicos. El uso del bambú en su forma natural se centra en techos e interiores pues todo el mundo está conciente del peligro de usar bambú donde el agua, el sol y las termitas lo pueden dañar. El punto principal del día concluyó con que es de muchísima importancia empezar a usar toda la planta y no solo una parte de ella. En algunos proyectos, donde se usan las variedades menores, el desperdicio puede ser hasta del 90%. El bambú es un excelente combustible y su uso para quemar ladrilos o para micro plantas de energía eléctrica es posible en muchos lugares. En Brasil se lo utiliza para hacer papel.

El último días se centró en la integración social del bambú que puede proveer de muchas oportunidades de ganancia e ingresos. Plantaciones pequeñas, grandes y medianas pueden proveer muchos trabajos directos e indirectos y, si la cadena de valor está bien organizada, muchas líneas diferentes de producción proveerán de un ingresos sostenible y servirán a las comunidades con materiales de construcción (principalmente para techos y divisiones internas), muebles y objetos de arte. Específicamente hay muchas oportunidades para trabajos a medio tiempo que generalmente benfician a las mujeres. Muchos artesanos cubanos presentaron una variedad impresionante de artesanías hechas a mano que han llegado a ser muy populares en todo el país.

Todos los participantes sintieron que han descubierto nuevos aspectos de su profesión, sean los científicos buscando nuevas mejoras o el empresario brasileño que hace propagación y transplante de semilla, o el consultor de México que administra cientos de hectáreas de guadúa, o el productor mexicano de muebles que ha empezado a hacer negocios con artesanos cubanos, o los colegas de la India quienes presentaron un interesante proyecto para la recuperación ecológica basada en el progresos social y económico de pequeños agricultores.