Kurt Rhyner   

Generalmente, los equipos de TMC usan motores de 12 voltios para vibrar la teja. En muchos talleres emplean transformadores para conectarlos a la red eléctrica, pero a menudo, la baja calidad de estos es la causa de una vibración deficiente, e inclusive, del recalentamiento y daño del motor. El transformador tiene que garantizar por lo menos 10 Amperios y disponer de un estabilizador para proveer corriente continua. Es importante que esté instalado en un lugar con ventilación natural donde no se recaliente ni le caigan suciedades. ECOSur los oferta apropiados para 110 ó 220 Voltios y 50 ó 60 Hz de frecuencia. Esto quiere decir, que pueden funcionar con la corriente casera, sin ningún problema, en todos los países.

 

Sin embargo, usar una batería de automóvil también reporta ventajas. Es más fácil garantizar un flujo estable, y si se trata de una batería grande de camión, esta es capaz de servir a más de una vibradora al mismo tiempo, y puede durar varias semanas, hasta que requiera una recarga. No obstante, es mejor recargarla más frecuentemente para garantizar la estabilidad, que es tan importante. Teniendo un cargador (aún de los simples) es posible mantener la batería en buen estado; incluso, en muchos lugares es favorable recargarla con una celda solar. Cabe destacar que al emplear una batería se gasta menos corriente.

El motor “tevi” consume de 3 a 6 Amperios durante la vibración, pero al arrancar este sube por un momento a 10 Amperios. Si conectamos dos o más vibradoras a un solo transformador no es necesario multiplicar la fuerza, ya que es raro que dos máquinas arranquen a la vez. Un transformador de 15 Amperios servirá para dos equipos y uno de 20 Amperios, para tres.